Una reflexión sobre la pobreza

Informativo Libre-./ Cada cinco segundos muere un niño de hambre. La pobreza merma la igualdad de oportunidades de millones de niños en todo el mundo. Ellos son más susceptibles de sufrir explotación, violencia, etc.

El problema no es sólo que haya carencia de recursos necesarios -alimento, vestimenta, vivienda, sanidad, educación- para llevar una vida digna, sino también la imposibilidad y la falta de oportunidad de producir los mismos.

Dicho problema se hace más grave teniendo al tener en cuenta la falta de voluntad política y la ineficacia de las medidas que toman los gobiernos.

El origen de la pobreza radica en la desigualdad de la distribución de los recursos, que pertenecen a unos pocos. Desgraciadamente los dueños del capital -tierras, empresas, mercados-, están más preocupados en conseguir más beneficios para ellos, sin importarles el costo humano y ecológico para lograr sus fines. Los gobiernos son directamente propuestos y dirigidos por la élite capitalista, para proteger los intereses de dicha élite y asegurar que el orden social permanezca inmutable. Esto impide que haya otras formas de distribución de las riquezas más equitativas, y también evita que la clase dirigente pierda sus privilegios.

Las consecuencias del sistema político-económico capitalista, son brutales. Entre ellas, se encuentra la pobreza, que afecta mayormente a niños.

Datos extraidos de Unicef:

- Más del 16% de los niños menores de cinco años en los países en desarrollo tienen desnutrición grave.

- Se estima en 400 millones los niños que no tienen acceso a agua potable en el mundo.

- Unos 270 millones de niños -el 14% de la población infantil mundial-, no tienen acceso a los servicios de salud.

- Alrededor de 140 millones de niños -todos en países en desarrollo-, no han acudido nunca a una escuela.